jueves, 3 de noviembre de 2011

Que Daría...

Que daría por un abrazo tuyo, 
y pegadita a tu pecho 
calmar mi agitado corazón.

Cuando me siento débil,
vienes a mi mente como un murmullo
que dice que todo estará bien.

A veces,
sólo a veces quisiera que la distancia,
fuera de solo un paso y ahí estuvieras tú.

Porque lo importante
no es lo que dices, 
sino lo que sientes y yo lo se.

Porque mis locuras,
mis angustias por no saber que hacer,
no caen en el abismo de la incertidumbre.

Quiero mirarte una sola vez,
y pensar que no todo ha sido en vano,
y que hice bien en creer en ti.